Marcelo Martínez de Giorgi estará a cargo durante un año del juzgado federal Nº11 de Comodoro Py, que quedó vacante la semana pasada después de la muerte de Claudio Bonadio. De esta manera quedó a cargo de dos juzgados, ya que también encabeza el Nº8. El reemplazo temporal de Bonadio fue definido a través de un sorteo público con bolillero realizado por la Cámara Federal porteña. El juzgado Nº 11 estuvo a cargo de Bonadio desde 1994 hasta la semana pasada, cuando murió por un tumor cerebral. Durante la feria el juzgado estuvo temporalmente a cargo de Sebastián Casanello, pero su designación fue transitoria ya que había sido elegido para una subrogancia de un mes antes de la muerte de su par. Martínez De Giorgi investiga el pago de coimas de Odebrecht por el soterramiento del Sarmiento y las presuntas irregularidades en la construcción de viviendas sociales a través del programa Sueños Compartidos que ejecutó la Fundación Madres de Plaza de Mayo. En tanto que en el exjuzgado de Bonadio se tramitan causas vinculadas a los cuadernos de las coimas, cuya investigación principal ya fue elevada a juicio oral. También el expediente del llamado "Operativo Puf", la presunta trama que montaron exfuncionarios kirchneristas para tratar de voltear la causa originada por el chofer Oscar Centeno. Además de una investigación al líder de Camioneros Hugo Moyano por presunto desvío de fondos en la obra social del gremio. El 11º es el segundo juzgado cuya titularidad está actualmente vacante en los tribunales federales de Comodoro Py, ya que también se encuentra sin magistrado definitivo el juzgado que estaba a cargo de Sergio Torres, que desde mediados del año pasado integra la Suprema Corte de Justicia bonaerense. De acuerdo con lo establecido por la Constitución Nacional tras la reforma de 1994, el proceso de selección de un juez comienza con el llamado a concurso público por parte del Consejo de la Magistratura. Tras un extenso proceso, el organismo eleva una terna de candidatos al Poder Ejecutivo para que elija a uno de ellos y eleve su pliego al Senado para su posterior aprobación.

Recientemente, los científicos rastrearon la fuente del FRB 180916.J0158+65 hasta una región en una tenue galaxia espiral parecida a la Vía Láctea donde se forman estrellas.

Un grupo internacional de astrónomos descubrió que una misteriosa señal de radio a 500 millones de años luz de nuestro planeta se emite en ciclos regulares. Se trata de la primera vez que se detecta una periodicidad en ráfagas rápidas de radio (FRB, por sus siglas en inglés).

Detectadas por primera vez en 2007, las FRB aún representan un desafío para los astrónomos, que tratan de dilucidar qué las genera. Su procedencia también es una incógnita, ya que de las más de 150 descubiertas, solamente unas pocas pudieron ser rastreadas.

El equipo de astrónomos que estudia las FRB con el radiotelescopio denominado Experimento Canadiense de Cartografía de la Intensidad del Hidrógeno (CHIME/FRB, por sus siglas en inglés) estableció que la señal se repite con una o dos ráfagas cada hora durante cuatro días, luego desaparece por 12 días antes de volver a emitirse por un nuevo periodo de cuatro días. De esta manera, el ciclo total de esta señal es de unos 16 días.

Recientemente, los científicos rastrearon la fuente del FRB 180916.J0158+65 hasta una región en una tenue galaxia espiral parecida a la Vía Láctea donde se forman estrellas. Ubicada a 500 millones de años luz de la Tierra, se trata de la fuente de FRB conocida más cercana a nuestro planeta.

Otro equipo sugirió que podría tratarse de un sistema binario compuesto de una estrella masiva y un núcleo estelar superdenso conocido como estrella de neutrones, en cuyo caso esta última podría emitir señales que periódicamente serían eclipsadas por los vientos opacos de su compañero gigante.